El Museo Franz Mayer presenta la sala Pintura y grabado. Del Medievo al Modernismo

El Museo Franz Mayer inauguró la sala “Pintura y grabado. Del Medievo al Modernismo” conformada por importantes obras de la colección que Franz Mayer inició en 1935, la cual comprende más de 800 pinturas europeas, novohispanas y mexicanas con las que se hace un recorrido a través de distintos lenguajes visuales, tradiciones artísticas y horizontes culturales de las últimas décadas del siglo XV hasta el primer tercio del siglo XX. Esta interesante colección muestra las transformaciones técnicas, plásticas, compositivas y teóricas de estas disciplinas artísticas.
La historia de esta magnífica colección se remonta al siglo pasado, cuando Franz Mayer adquirió la mayoría de las pinturas y grabados en distintas subastas en Parke Bernet Galleries, Nueva York. En marzo de 1943, compró el Retrato de Isabel Clara Eugenia del círculo de Antonio Sánchez Coello; en abril de 1945 adquirió el retrato de Isabel de Medici de Alessandro Allori y el 28 de noviembre de 1951, compró la pintura flamenca ‘Damas con sirvientas’ de Lancelot Volders, por mencionar algunos ejemplos.
En marzo de 1962 Franz Mayer otorgó en comodato 77 pinturas de origen europeo al Museo Nacional de San Carlos para que se exhibieran en sus salas permanentes. Según la copia del contrato –que se conserva en el Fondo personal Franz Mayer– a la muerte del alemán, el Banco de México y el Patronato de San Carlos debían realizar la devolución de estos cuadros para exhibirse en el Museo Franz Mayer a partir de su apertura en 1986.
El contenido de la nueva sala irá rotándose para acercar al público a obras que no se tenían exhibidas o que su presencia en salas no estaba resaltada al ser parte de un recorrido general. Estarán exhibidas 56 obras, 36 pinturas, 17 grabados, dos ejecutorias de Hidalguía y un libro antiguo.
La sala de pintura y grabado es parte de un plan de renovación a mediano plazo de la museología y museografía de las salas que albergan las colecciones permanentes del museo.
El acervo del museo cuenta con piezas de extraordinario valor histórico como el primer grabado que se hizo sobre lámina de cobre en la Nueva España en 1615 con una representación de la Virgen de Guadalupe rodeada por sus milagros, también destaca una pintura sobre tabla del siglo XV considerada la más antigua de la colección del Franz Mayer, atribuida a Luis Borrassá, que formó parte de un retablo dedicado a San Hipólito.
También se presentan piezas de pintura europea procedentes de talleres alemanes, españoles, italianos, franceses y de los Países Bajos. Destacan obras firmadas por reconocidos maestros como Bartholomäus Bruyn “El Viejo” y José de Ribera “el Españoleto”, quienes plasmaron temas religiosos, civiles, de vida cotidiana y simbólicos, acordes con los gustos y los ideales de cada época.
El público podrá apreciar valiosos grabados de artistas sobresalientes como Albrecht Dürer, Lucas de Leyden, Lucas Cranach “el Viejo”, Anton van Dyck, Jacques Callot y Rembrandt van Rijn.
La sala reúne destacadas pinturas realizadas en el territorio mexicano durante el periodo virreinal como retratos y temas históricos y devocionales de artistas novohispanos como Juan Correa, Manuel y Juan González, Miguel de Herrera, Andrés López y Miguel Cabrera. Asimismo presenta extraordinarias obras hechas en técnicas pictóricas de gran complejidad como los tableros con incrustaciones de concha y los mosaicos de arte plumario.
Del siglo XIX, se presentan obras de maestros como Pelegrín Clavé, José María Velasco y pintores viajeros cronistas visuales del paisaje natural y urbano del territorio nacional.
De principios del siglo XX, destaca un paisaje que Diego Rivera pintó cuando aún era estudiante de la Academia de San Carlos, así como paisajes y retratos de Joaquín Sorolla e Ignacio Zuloaga.
Esta nueva sala de pintura y grabado enriquece la experiencia del visitante al acercarlo a una colección muy interesante y valiosa. Acompañando a la nueva sala se tendrán dos conferencias sobre la colección de pintura y grabado, así como cédulas para que los más pequeños puedan disfrutar el recorrido.